Tras las elecciones autonómicas del 25 de Marzo, que ha supuesto un excelente resultado para todos nosotros concretizado en una subida de 6 diputados y de 121.000 votos respecto a las de 2008, Izquierda Unida ha de posicionarse, una vez más, sobre su futuro.
Y es, en este andar hacia el futuro cuando, a veces, hay que mirar atrás para recuperar las lecciones aprendidas y éstas nos dicen, clara, nítidamente, que debemos defender y apoyar nuestro propio proyecto, que debemos mantenernos dignamente en nuestro propio camino hasta conseguir que la voluntad de los andaluces nos den la suficiente fuerza como para incidir decisivamente en un cambio de calado, sin matices, sin ambages y sin ambigüedades. Hasta que llegue ese esperado momento, la dignidad, la honradez y la transparencia deben ser nuestra mejor tarjeta de presentación, sin entrar en malabarismos post-electorales y en acuerdos que, muchos de los que nos encontramos en las trincheras de esta ilusión que es IU, consideramos una felonía hacia nuestros votantes.
¿Con quién se nos plantea que pactemos? ¿A quién se nos plantea que invistamos? ¿Acaso es aquel que ha apostado todos estos años por una sociedad andaluza más justa e igualitaria, aquel que ha diseñado un gobierno del pueblo y que ha administrado los caudales públicos con extrema delicadeza?
Las políticas neoliberales han sido aplicadas en este país por unos y por otros, distintas caras de la misma moneda. Sí, la misma moneda, o ¿acaso hemos olvidado quienes han contribuido directa y activamente a la propagación de los dramas familiares que se esconden detrás de los 5 millones de parados, aderezados con desahucios inhumanos (más de 380.000 con el PSOE) sin que, en el gobierno, hayan hecho nada para remediarlo?; o, ¿acaso no han sido quienes aprobaron la nueva edad de jubilación a los 67 años, quienes aprobaron la congelación de pensiones y la reducción de los salarios de empleados públicos? ¿acaso no fueron quienes, ciñéndose a esas buenas prácticas neoliberales, subieron el IVA a todos al 18% sin progresión fiscal, abarataron el despido a 20 días/año por causas objetivas o inyectaron fortunas de dinero público a la banca?
¿Acaso hemos vivido en otra Andalucía?
Pues no, hemos vivido en esta misma Andalucía que amamos, esta Andalucía de la desesperanza, desesperanza que ha ido calando poco a poco, durante más de 30 años, a base de clientelismos políticos, de derroches, de enchufismos, de especulación urbanística, de nepotismo, de desprecio a las minorías, de puro régimen,… desesperanza a la que no debemos abrazarnos; no podemos permitirnos, no debemos permitirnos dejar de ser esa pequeña, pero digna luz, de quienes ven en este bipartidismo uno de los graves problemas de la decadencia democrática de este país.
Andalucía necesita una regeneración democrática, una limpia que llegue a cada uno de sus rincones y saque a la luz las inmundicias que se han generado durante más de tres décadas.
Cierto es que, si IU no acepta el “abrazo del oso” en cualesquiera de sus formas, será el PP quien gobierne esta tierra. Y es aquí, en este punto, donde se establece la encrucijada, cruce de caminos que la Asamblea de IU de La Puebla del Río tiene meridianamente claro: IU debe apoyar su propio proyecto, sin ser muleta coyuntural de nadie, y que gobierne la lista más votada. Serán esos mismos andaluces quienes refrenden o derroten el gobierno y, si el PSOE es capaz de reinventarse y de regenerarse, cambiando realmente de propuestas y de políticas, habrá tiempo de caminar juntos un trecho antes de las próximas elecciones, si se dieran las circunstancias; pero mucho ha de cambiar.
Aspiramos a gobernar para cambiar y es, precisamente por ello, por lo que no debemos hacerlo ahora.
Desde un espíritu analítico, contrastadas todas las opiniones, desde la más profunda reflexión, con la suficiente perspectiva que ha dado el paso lento de los días, asimilando portada tras portada, la Asamblea Local de Izquierda Unida, por UNANIMIDAD de todos sus miembros, manifiesta:
1. Que la postura a adoptar a nivel andaluz debe basarse en el NO PACTO DE GOBIERNO y NO APOYO A LA INVESTIDURA de ningún candidato del resto de fuerzas políticas del Parlamento Andaluz
2. Que la decisión final debe sustentarse en REFERÉNDUM VINCULANTE a las bases, ésas que mantienen vivo el proyecto de Izquierda Unida de forma independiente, autónoma y alternativa.
La Puebla del Río, 4 de Abril de 2012
